Ejercitación para Examen Integrador

Lean el siguiente texto de la investigadora ecuatoriana Gisella Harb Muñoz, publicado en 2006 en Quito por la Universidad Andina Simón Bolivar.

La construcción mediática del otro

1.Este trabajo pretende investigar cómo se construye mediáticamente al colombiano, a través de las miradas de los distintos actores sociales, plasmados en la prensa nacional, en el discurso periodístico; aunque existe estrecha vinculación con las Agencias Internacionales de noticias finalmente la información es adquirida, re-procesada, re-contextualizada y a veces re-semantizada por la prensa nacional.

2.Advierte Van Dijk que los medios de comunicación constituyen agentes esenciales –entre otros– en la configuración del imaginario social, inciden de manera directa en la construcción y reproducción de imágenes sobre diversos grupos –en este caso de los colombianos– crean un clima de opinión y repercuten sobre las categorías sociales, políticas, económicas y culturales a las cuales son asociados[1].

3.Por ello, el énfasis que otorga al análisis del discurso pues constituye a su entender un mecanismo que permite develar el pensamiento compartido por los grupos, determinado por las condiciones sociales y diseminado por los medios de comunicación.

4.De acuerdo con Silva[2], en la propuesta de Van Dijk encontramos dos básicas de análisis del discurso: una superficial que nos remite a las estructuras materiales o concretas del discurso y que fundamentalmente abarca cuatro espacios que son: a) los gráficos, que permiten otras formas de aprehensión del texto y cumplen a su vez funciones cognitivas, sociales e ideológicas, b) los sonidos o expresiones verbales o radiales que constituyen la estructura fonológica del discurso, ¿Cómo se articula o recepta el discurso? ¿Hay un tono o volumen?, en otras palabras, ¿Cómo se lo dice? Este espacio es vital al analizar conversaciones, emisiones de cine, etc., c) la morfología, que constituye la estructura gramatical del discurso y que se interesa más por los neologismos, es decir, palabras o expresiones nuevas que conllevan otro sentido, así como por la terminología relacionada específicamente a determinados ámbitos, d) la sintaxis, que comprende la forma oracional y relaciones jerárquicas de la expresión y que tiene repercusiones directas en la construcción de significados, y e) el estilo, como por ejemplo el tono. Y una segunda dimensión profunda de análisis que tiene que ver con el orden u organización de los significados que son atribuidos a las estructuras superficiales y que pretende entender el sistema de significados o conceptos detrás de las frases o palabras y las intenciones o motivaciones de enunciación.

5.De vuelta al tema de nuestro análisis, es imperante destacar que dadas las circunstancias económicas, políticas y sociales por las que atraviesa el pueblo colombiano, se han producido desplazamientos de diversa índole hacia nuestro país y precisamente, la interacción con estos grupos humanos ha pasado a formar parte de la cotidianeidad de los ecuatorianos. Esa interacción se ve en repetidas ocasiones modelada por las imágenes que nos formamos de estos grupos, proceso en el que los medios de comunicación constituyen agente preponderante en la construcción y reproducción de identidades, pues «la población formula inferencias estratégicas a partir (…) del discurso, construye modelos mentales de las situaciones étnicas y las generaliza en unos esquemas de actitud general negativa o de prejuicios que integran las opiniones básicas sobre los grupos minoritarios relevantes».[3]

  1. Sostiene Noemí Fraguas:

(…) la figura del migrante (…) ha adquirido en los últimos años una visibilidad social expresada fundamentalmente en discursos oficiales y en algunos medios de comunicación, donde estos migrantes son acusados de la crisis ocupacional, responsables de la inseguridad y la delincuencia, especialmente cuando se los ubica en condición de ilegalidad. Un discurso manipulador que distorsiona la realidad.[4]

7.Según Fraguas, basta agregar al migrante el rótulo de ilegal para asociarlo a la delincuencia, la peligrosidad, la inseguridad lo que conlleva a crear un consenso en la población que desencadena en una serie de demandas para frenar dicha migración, en este caso, por ejemplo, la solicitud del visado y la Tarjeta Andina de Migración.

8.No es la intención de este trabajo reforzar los antiguos mitos respecto a los medios de comunicación, aquellos que los presentan como simples reproductores mecánicos y acríticos del espíritu de la clase dominante o comprometidos con los intereses del «imperialismo», o que los catalogan como «todopoderosos» y les atribuyen poderes omnímodos, no obstante, es oportuno admitir que esa cotidianeidad que mencionamos anteriormente sí está atravesada por la acción de los medios de comunicación colectiva y que por el contrario, es impensable su existencia por fuera de esta dimensión; como sostiene Van Dijk, el procesamiento de información social se basa en su mayor parte en el discurso y la comunicación, en el contexto de las sociedades modernas.

9.Por ello resulta pertinente identificar cuál es la voz y el discurso que legitima la prensa y que conlleva a la construcción de ese imaginario; descubrir, en el sentido cartesiano de la significación, el acto del habla al que se refiere Foucault, es decir, la prensa ritualiza también el habla a través de un corpus ligado a la vez a unos actores sociales o generadores de opinión constituyéndose como acto del habla.

10.El objetivo no es obtener visiones personalizadas respecto al problema en cuestión, no es un trabajo que parte del individuo; por el contrario, se busca identificar las nociones predominantes en el discurso periodístico con relación a este grupo (los colombianos), nociones que como señalamos anteriormente, son determinadas desde la visibilidad mediática, ejercen una forma de control sobre los grupos y legitiman el comportamiento de las personas.

  1. Reemplace los conectores subrayados por otros de significado equivalente. (20 p.)
  2. Caracterice al enunciador y al enunciatario del texto. Fundamente su postura (20 p.)
  3. Busque dos subjetivemas en el Párrafo 7 y relaciónelos con la postura de la autora sobre el tema. (10 p.)
  4. Caracterice y ejemplifique dos rasgos del estilo académico del texto. (15 p.)
  5. Transcriba una reformulación. (10 p.)
  6. Transcriba un ejemplo. Detalle el concepto que se ejemplifica. (10 p.)
  7. Redacte la referencia bibliográfica del texto anterior. (10 p.)
  8. Explique cuál es el tema que analiza la autora en este texto y el marco teórico propuesto para el análisis. (20 p.)

[1] Teun van Dijk, Racismo y análisis crítico de los medios, Barcelona, Paidós, 1997, p. 243. Plantea Van Dijk que hay una serie de mecanismos a través de los cuales se reproducen las ideologías, entre ellos, dos principales que son por un lado, el mundo de lo cotidiano, el habla popular, el mundo íntimo, y por otro lado, el mundo mediático que ocupa un lugar importante en la construcción del imaginario colectivo.

[2] Omer Silva, «El análisis del discurso según Van Dijk y los estudios de la comunicación», en Revista Razón y Palabra, No. 26, México, 2002, s.n. Consultado en internet, 8 de junio de 2003, disponible en: www.cem.itesm,mex

[3] Teun van Dijk, Racismo y análisis crítico de los medios, p. 77.

[4] Noemí Fraguas, «Fragilización de las relaciones sociales y emergencias de actitudes discriminatorias», en José Almeida, comp., El racismo en las Américas y el Caribe, Quito, Departamento de Antropología PUCE / Abya-Yala, 1999, p. 44.

 

Segundo parcial

Requisitos de entrega

La versión final del segundo parcial debe entregarse impresa junto con los borradores corregidos y el porfolio (todos los TPs corregidos)

Extensión mínima: 1 página y media Hoja A4 (sin contar la Bibliografía)

Márgenes: Izquierdo 3 cm. Derecho 2 cm.

Letras Times New Roman 12

Interlineado 1,5

Párrafos justificados

Citas de más de tres líneas en párrafo aparte con margen izquierdo mayor.

En margen superior derecho incluir Materia, Número de Comisión y Apellido y nombre.

Importante:

A partir del jueves 21/11 las Clases de consulta serán en las computadoras del primer piso (debajo de la Biblioteca), para trabajar el uso de Word.

Segundo Simulacro de parcial

1.En este trabajo se examinan algunos aspectos discursivos del papel de las élites y las instituciones en la producción y reproducción del racismo en las sociedades europeas.

  1. Existen varias razones para centrar el estudio en el racismo de las élites y no en el racismo “popular” (para más detalles, ver van Dijk, 1993). En primer lugar, muchas de las élites afirman a menudo que “por supuesto” no tienen nada que ver con el racismo. Es más, los políticos respetables de los partidos democráticos, los periodistas de los principales periódicos o los eruditos tienden a acusar a otros de racismo, normalmente a aquellos que están en la extrema derecha o a la gente sin educación de los barrios populares, que se enfrenta a diario con inmigrantes.

3.En segundo lugar, el prejuicio y la discriminación no son innatos, sino aprendidos, y se aprenden principalmente del discurso público. Este tipo de discurso, como los debates políticos, las noticias y los artículos de opinión, los programas de televisión, libros de texto y trabajos de investigación académica están en gran parte controlados por las élites. Si este discurso fuera sistemática y predominantemente no racista o antirracista, sería muy improbable que el racismo estuviera tan extendido en la sociedad como lo está, asumiendo que en muchos sentidos las élites son los guardianes morales de la sociedad y normalmente dan el buen o mal ejemplo de prácticas sociales.

4.En tercer lugar, sabemos por la historia del racismo que varias élites han tenido siempre un papel destacado en la dominación étnica y racial. De hecho, el concepto mismo de “raza” fue “inventado” por académicos, igual que la noción de superioridad racial, como sabemos por la extendida literatura científica del siglo XIX y gran parte del siglo XX (Barkan, 1992; Chase, 1975; Haghighat, 1988; Shipman, 1994; Unesco, 1983). El colonialismo, la eugenésia, la segregación, el Holocausto, el Apartheid y la “limpieza étnica” fueron prácticas racistas llevadas a cabo por políticos entonces “respetables”, y legitimadas por periodistas, académicos y científicos. Sus discursos se reflejaron en novelas, películas, libros de texto y discursos de “sentido común” en la vida diaria. Allá donde encontramos formas de racismo “popular”, éste está en gran medida preformulado por las élites y sus líderes políticos y medios de comunicación, o utilizados de manera populista para restringir la inmigración. Y, finalmente, en los casos en que las élites no emprendían explícitamente la producción de prejuicios y estereotipos y la exclusión de los otros de su propio campo (política, medios, ciencia, etc.) se les puede por lo menos culpar de combatir de manera insuficiente el racismo cuando tenían los medios y la oportunidad de hacerlo.

5.En suma, hay unas cuantas razones para lanzar la tesis de que las élites siempre han sido, y aún son, parte del problema del racismo, más que la solución antirracista y multicultural. Sin embargo, como el racismo de las élites es a menudo bastante sutil e indirecto, y para distinguirlo del manifiesto y ostensible racismo de la extrema derecha, necesitamos investigar qué formas toma ese tipo de racismo hoy en día. Quizá estamos tan acostumbrados a este tipo de racismo que ya ni siquiera lo percibimos, como ha sido el caso de muchas formas de machismo, igualmente negado a menudo por los hombres.

6.El racismo de las élites es principalmente discursivo. Los políticos, los periodistas, los académicos, los jueces y los directivos lo que hacen fundamentalmente es escribir y hablar, y a través de sus diversos discursos dominantes expresan y reproducen sus creencias, ideologías, planes y políticas. Un discurso de un político prominente, un artículo de opinión de un periodista estrella, o un libro de un académico de renombre pueden tener un efecto más negativo que cientos de conversaciones tendenciosas en la calle, en el autobús o en un bar. En este trabajo, examinamos algunas de las propiedades de ese racismo discursivo de las élites.

7.Al mismo tiempo, definimos la noción de “racismo institucional” como las prácticas discursivas organizadas de las élites, como en el caso de los debates en el parlamento, las noticias que aparecen en la prensa, el documento burocrático y lenguaje de la administración nacional o local, o los libros de texto en la escuela y en la universidad. Aunque se pueda obtener una explicación sociológica de las prácticas sociales individuales y hablar de las acciones o políticas de las organizaciones e instituciones, hay que tener en cuenta que los discursos de estas instituciones son productos individuales o colectivos de sus miembros, y están legitimados por su liderazgo de élite. Una institución es tan racista como lo son sus miembros, y especialmente sus líderes. Esto no significa que reduzcamos el racismo al prejuicio personal, sino que queremos enfatizar que los prejuicios socialmente compartidos son producidos y reproducidos conjuntamente y en colaboración por colectivos de miembros de la sociedad a través de discursos institucionales de los campos de la política, los medios, la educación, la enseñanza y las empresas de negocios.

 

Racismo

Las nociones de “racismo de la élite” y “racismo institucional” presuponen el concepto de racismo, que necesitamos definir brevemente para poder entender el papel del discurso y las élites en la reproducción del racismo. El racismo es principalmente un sistema de dominación y de desigualdad social. En Europa, las Américas y Australia esto significa que una mayoría (y algunas veces una minoría) “blanca” domina a minorías no europeas. La dominación se define como el abuso de poder de un grupo sobre otro, y está representada por dos sistemas interrelacionados de prácticas sociales y sociocognitivas cotidianas, es decir, por varias formas de discriminación, marginación, exclusión o problematización por un lado y por creencias, actitudes e ideologías prejuiciosas y estereotipadas por otro. En efecto, éstas últimas pueden ser consideradas en muchos sentidos como las “razones” o “motivos” que explican y legitiman las primeras: la gente discrimina a los demás porque cree que los otros son de alguna manera inferiores, tienen menos derechos, etc.

El discurso es la práctica social que relaciona estos dos campos de racismo. Es en sí mismo una práctica social prominente como otras, y la práctica social casi exclusiva de las élites simbólicas y las instituciones: lo que “hacen” lo hacen a través de textos o disertaciones.

Al mismo tiempo, el discurso es prácticamente la única manera en que los prejuicios racistas se expresan y reproducen en la sociedad: estas cogniciones sociales se adquieren generalmente a través de los medios de comunicación, los libros de texto y las conversaciones cotidianas con los miembros de la familia, conocidos, amigos o colegas, conversaciones que a su vez pueden estar basadas en lo que la gente ve en la televisión o lee en el periódico. Casi todo lo que sabe la mayor parte de la gente sobre países no europeos, sobre inmigrantes y minorías, lo sabe a través de los medios de comunicación, y lo mismo sucede con sus opiniones y actitudes que, a su vez, son la base de las prácticas sociales de discriminación y exclusión.

Así, el proceso de la producción y reproducción de conocimiento, opiniones e ideologías se debería definir principalmente en términos de las prácticas discursivas de las instituciones dominantes y sus élites. Esto también se aplica para la reproducción de prácticas e ideologías racistas.

Siguiendo esta misma lógica, esto se aplica a la reproducción del antirracismo. Como consecuencia de la resistencia de la minoría o la presión exterior, algunos agentes de cambio entre las élites políticas, mediáticas y académicas pueden empezar a formular discursos alternativos que cuestionan, critican y se oponen a discursos dominantes y otras prácticas. En cuanto estas voces de disensión tienen acceso a los medios de discurso público, pueden estimular la formación de movimientos de oposición, ONG, partidos o grupos de presión, como también ocurre con los movimientos antirracistas en Europa y las Américas.

Sin embargo, el cambio serio y sistemático sólo es posible cuando la mayoría de los líderes de la élite en la política, los medios de comunicación y el mundo académico respalda las ideologías antirracistas de grupos contrarios, como ha sido el caso en los Estados Unidos en el período post-segregacionista, en el África post-Apartheid o en la Europa post-Holocausto, en las formas más extremas de racismo y antisemitismo.



Van Dijk, T. (2006) “Discurso de elites y racismo institucional”, en Lario Bastida, M. (Coord.) Medios de comunicación e inmigración, Murcia, CAM.

  1. Lea el fragmento y señale si se trata de un texto académico. Fundamente su respuesta. (15 p.)
  2. Reemplace los conectores subrayados por otros de significado equivalente. (20 p.)
  3. Busque dos subjetivemas en el Párrafo 5 y explique para qué los usa el autor. (10 p.)
  4. Explique un uso de comillas del párrafo 4. (10 p.)
  5. Caracterice al enunciador y al enunciatario del texto. Fundamente su postura (20 p.)
  6. Defina y diferencie los conceptos de dominación y racismo según van Dijk. Incluya un ejemplo en su respuesta. Mínimo 10 líneas. (25 p.)

 

Simulacro de parcial. Resolver para el jueves 3/10 (Tiempo de resolución 2 Hs.)

1.Las relaciones de poder constituyen uno de los focos de atención principales para el Análisis Crítico del Discurso (ACD). Su interés parte del hecho de que los grupos sociales dominantes ejercen su poder a través de medios económicos o legales, pero también a través de medios lingüísticos, la utilización de un tipo de lenguaje concreto puede ser un símbolo de poder[1].

2.Esta cuestión tiene una importancia fundamental en el discurso de los medios de comunicación, el ACD se centra en dos aspectos principales: las relaciones de poder sobre el discurso y las relaciones de poder en el discurso.

3.El primer tipo de relaciones se refiere al problema del acceso al discurso periodístico, es decir, quién aparece a menudo en los medios de comunicación y, sobre todo, quién goza de una credibilidad suficiente como para que sus declaraciones sean noticia automáticamente. En este sentido, las vinculaciones de los medios de comunicación con los grupos dominantes son numerosas; por un lado, dependen en gran medida del mercado publicitario con lo que deben atender en mayor o menor medida a sus intereses y por el otro, dado que necesitan un suministro de noticias constante, las fuentes gubernamentales y los grandes grupos empresariales se han convertido en actores sociales con un acceso preferencial a los medios ya que disponen de departamentos creados ad hoc. Como señala Mark Fishman:

 … los trabajadores informativos están predispuestos a considerar objetivos los       relatos burocráticos, puesto que ellos mismos participan en el apoyo a un           orden normativo de expertos autorizados socialmente. Los periodistas se rigen por el principio de que los funcionarios han de saber lo que tienen la obligación de saber… Concretamente, un trabajador informativo identificará la declaración de un funcionario no sólo como una afirmación, sino como un fragmento de conocimiento verosímil y creíble. Esto equivale a una división moral del trabajo: los funcionarios están en posesión de los hechos, los periodistas se limitan a recogerlos. (CHOMSKY Y HERMAN 1988:51)

 

4.Las relaciones de poder en el discurso se refieren, por tanto, al control que los actores sociales con acceso al discurso ejercen sobre sus características concretas como pueden ser los temas que se tratan con amplitud o los que reciben escasa atención, la visión que se ofrece de un determinado problema, los presupuestos ideológicos que sustentan el discurso periodístico, etc.

5.Otro de los planteamientos fundamentales del ACD es el hecho de que el discurso realiza una labor ideológica. Las ideologías pueden ser concebidas como conjuntos de creencias que estructuran y, en cierto modo, controlan la visión que un determinado grupo tiene de la realidad social. Sin embargo, para que un conjunto de creencias determinadas formen una ideología es necesario que sean compartidas socialmente.

Es en este punto en el que los medios de comunicación desempeñan una labor ideológica fundamental: constituyen el principal medio a través del cual determinados presupuestos ideológicos se socializan. Por ejemplo, la representación que una gran mayoría de la sociedad española actual tiene del fenómeno de la inmigración tiene mucho que ver con la imagen que emana de los medios. En comparación con otros países europeos España tiene una tasa de inmigración relativamente baja, sin embargo, la mayoría de la sociedad española tiene ya una imagen negativa de esos inmigrantes, antes incluso de tener algún contacto con ellos. Este hecho proviene, en cierta medida, de las consecuencias ideológicas del discurso periodístico que se centra sistemáticamente en los problemas que tienen o causan los inmigrantes como la delincuencia o el tráfico de drogas.

6.La labor ideológica del discurso periodístico en este aspecto es doble; por un lado, construye una representación social de los inmigrantes como un grupo básicamente problemático y, por el otro, fabrica, en términos de Chomsky y Herman (1988), un “consenso” social sobre nuestras actitudes hacia los inmigrantes, construyendo una imagen en la que “nuestra sociedad” es fundamentalmente tolerante y en la que el racismo es una actitud incidental y aislada[2].

7.Sin embargo, el racismo es actualmente un complejo sistema ideológico que se encuentra en la base de numerosas prácticas sociales y que, en ocasiones, se expresa y reproduce a través de medios discursivos. Pero para estudiar adecuadamente la presencia de determinados prejuicios relacionados con el racismo en el discurso de los medios de comunicación es necesario atender brevemente a la naturaleza de las ideologías y a las funciones sociales de las mismas. (…)

8.También, es necesario señalar que no se deben confundir las ideologías con sus expresiones discursivas (VAN DIJK 2000:353), si mantuviéramos este paralelismo nos veríamos obligados a admitir que hay tantas ideologías como discursos, lo cual es abiertamente incoherente. Las ideologías tienen un componente fundamental de tipo cognitivo, es decir, son representaciones sociales que guían las diferentes acciones sociales de una persona, los discursos pueden expresar creencias ideológicas, pero raramente una ideología completa, además, en muchas ocasiones esos presupuestos ideológicos no se expresan explícitamente sino de una manera más sutil e implícita por lo que es necesario inferirlos.

9.Por otra parte, las ideologías desempeñan una serie de funciones sociales fundamentales. Sirven como factor de unión entre los miembros de un grupo[3] ya que en ellas se tienen en cuenta los intereses y objetivos comunes; en este sentido, las ideologías crean solidaridad entre los miembros de un grupo. Sin embargo, ningún análisis de las ideologías puede dejar a un lado el hecho de que éstas, en ocasiones, sirven para legitimar y justificar una determinada distribución del poder social.

DE LA FUENTE GARCÍA, MARIO (2004) Análisis crítico del discurso y racismo en los medios de comunicación. Madrid, Arco Libros.
  1. Lea el fragmento y señale si se trata de un texto académico. Fundamente su respuesta. (15 p.)
  2. Reemplace los conectores subrayados por otros de significado equivalente. (20 p.)
  3. Busque dos subjetivemas en el Párrafo 6 y explique para qué los usa el autor. (15 p.)
  4. Caracterice al enunciador y al enunciatario del texto. Fundamente su postura (20 p.)
  5. Explique el uso de comillas en el párrafo 6. (10 p.)
  6. ¿Cuál es la labor ideológica que ejercen los medios de comunicación respecto de los inmigrantes? Mínimo 10 líneas. (20 p.)

[1] En este sentido, la Sociolingüística ha mostrado como, por ejemplo, la variedad lingüística de las clases sociales altas es siempre considerada como prestigiosa y más correcta mientras que la de las clases bajas es estigmatizada como vulgar e incorrecta. La corrección de una variedad lingüística debería basarse en su adecuación al contexto comunicativo en el que se produce; de esta manera, ambas variedades serían igualmente correctas ya que se sitúan en contextos radicalmente distintos con necesidades comunicativas diferentes.

[2] Si hemos concluido que los medios de comunicación dan un acceso preferencial a las clases dominantes como los políticos o los grupos empresariales parece lógico suponer que los presupuestos ideológicos que subyacen al discurso periodístico sean en realidad un reflejo de la ideología de esas elites con lo que los medios se convierten en una parte integrante de las mismas.

[3] En este sentido van Dijk señala una serie de características que definen el concepto de grupo social: un conjunto de personas forman un grupo social cuando tienen una serie de experiencias que les hacen actuar como colectividad pero sobre todo cuando comparten una serie de representaciones sociales. “Sólo los grupos pueden desarrollar ideologías, y la definición de grupo a su vez, presupone no sólo condiciones, experiencias o acciones socialmente compartidas sino también, y en especial, representaciones sociales compartidas, incluyendo ideologías” (VAN DIJK 2000:183).

 

Jueves 19/09 adhiero al paro docente

El jueves 19/09 no vamos a tener clase porque adhiero al paro docente. Para el lunes, por favor,  lean el texto de la página 71 del libro de Melville Herkovits y realicen las siguientes consignas:

  1. Marcar en el texto las características del estilo académico.
  2. Señalar los subjetivemas presentes en el párrafo 4 y explicar si el autor concuerda con esa valoración o la atribuye a otro punto de vista.
  3. Caracterizar al enunciador y al enunciatario. Fundamentar la respuesta con ejemplos del texto.

Conectores y marcadores

1. ORGANIZADORES DEL DISCURSO : señalan las distintas partes en que se estructura un texto (inicio, desarrollo, cierre…). Pueden ser:
Introductores : en principio, para comenzar, para empezar, ante todo… .
Continuativos : bueno, pues, entonces,para continuar, digamos, bien… .
Enumerativos : en primer lugar, en segundo lugar, en tercer lugar, primero, segundo, tercero, luego, después, en seguida, a continuación, por una parte, por otra… .
Conclusivos y recapitulativos : en conclusión, en fin, por fin, finalmente, en pocas palabras, en suma, en resumen, en definitiva, al fin y al cabo, en síntesis… .

2. MARCADORES ARGUMENTATIVOS Y REFORMULATIVOS : refuerzan la
argumentación, matizan, aclaran los enunciados…:

-Reformulación: es decir, esto es, o sea, queremos decir, mejor dicho, en otros términos, dicho de otro modo, mejor aún, más bien,…
Ejemplificación : por ejemplo, a saber, pongamos por caso, valga
como ejemplo, concretamente, en concreto, sin ir más lejos, verbigracia… .
Tematización: a propósito de, en cuanto a, pasando a, por cierto… .
Distanciadores : hacen perder la relevancia de lo dicho anteriormente: en cualquier caso, de cualquier modo/forma/manera, de todos modos, en todo caso…
Expresión de punto de vista: en nuestra opinión, a nuestro juicio, a nuestro entender, desde nuestro punto de vista, a nuestro parecer, por lo que a nosotros respecta…
Comentadores: introducen un nuevo comentario: pues bien, dicho esto… .
De refuerzo o certeza: en realidad, en el fondo, de hecho, en efecto, la verdad, desde luego… .
Contraargumentativos: se oponen a lo dicho anteriormente: en cambio, sin embargo, pero, no obstante, por el contrario, aun así, en contraste, si bien es verdad, con todo…
3. ADITIVOS: añaden nueva información: asimismo, y, además, más aún, de igual modo, incluso, inclusive, todavía más, del mismo modo, por lo demás, de igual manera, encima, también, es más, de la misma manera… .

4. MARCADORES DE ACTITUD: se relacionan con la modalidad y expresan cómo se enfrenta el hablante al mensaje. Hay varios tipos:

a) De la enunciación: si se refieren a la producción misma del enunciado: francamente, sinceramente, honradamente, brevemente, sin
rodeos;

b) Temáticos: expresan el tema, aspecto o punto de vista: formalmente, socialmente, actualmente…;

c) Del enunciado: expresan la actitud del hablante ante el contenido del mensaje
y pueden ser:

Evaluativos: desgraciadamente, por desgracia, afortunadamente…;

Modales: expresan posibilidad, duda, obligación, necesidad: tal vez, quizás, posiblemente, seguramente, necesariamente…;

Evidenciales: intensifican o atenúan la fuerza de lo que se expresa:
ciertamente, efectivamente, naturalmente, al parecer, por lo visto…

5. CAUSALES Y CONSECUTIVOS : expresan la relación lógica de causa o consecuencia entre los enunciados: por (lo) tanto, por eso, por consiguiente, por ello, de otra manera, puestas las cosas así, en consecuencia, por lo cual, a causa de esto, en ese caso, así, en tal caso, así pues, de ahí… .
6. FINALES, CONCESIVOS, COMPARATIVOS….: para(que), a fin de que, con vistas a, aunque, a pesar de que, aun cuando… .
7. TEMPORALES: ordenan cronológicamente hechos y acciones: en un principio, antes que nada, inmediatamente, al mismo tiempo, más tarde, mientras (tanto), al instante, en otra ocasión, entretanto, acto seguido, a la vez… .
8. ESPACIALES: indican la situación de los objetos o de los lugares: enfrente, más allá, a la izquierda, en el fondo… .

Lunes 2 y jueves 5 de septiembre no tenemos clase porque viajo a un congreso.

Para el lunes 9 de septiembre realizar las siguientes actividades del libro:

Leer los siguientes textos y resolver las consignas que están a continuación:

e) Texto de Félix Luna sobre Facundo Quiroga (Pág. 24)

y g) texto de Sarmiento también sobre Facundo Quiroga (Pág. 31).

Consignas

1. Señalar las palabras o expresiones que se utilizan para identificar a los participantes y las acciones que estos realizan. Compararlas y analizar los subjetivemas para ver las valoraciones o juicios.

2. Enumerar los hechos que se presentan.

3. Caracterizar al enunciador y enunciatario de cada texto.